En un mercado de La Paz, en Bolivia, apareció de pronto, escrito sobre un pedazo de cartón, el símbolo de la “@“. Si, esa contraseña gráfica de los tiempos modernos que, sin embargo, había estado allí desde la antigüedad.
“Del internet dicen que es”, comentó la casera vendedora de papas que aún se compran y se venden por “arrobas”, tras aceptar la foto con tal de no aparecer en ella.
El correo electrónico ha sido el cordón umbilical de nuestra conexión con internet: durante años fue la aplicación más utilizada y para muchos aún es imprescindible. Son los tiempos de la arroba, como llamamos en español a la @, que además se utiliza para los alias en redes sociales.
La @ forma parte de la vida de conectados y desconectados: aparece por todas partes, hay quien la usa de adorno y ya es una figura habitual en directorios o tarjetas de visita.
No pensamos a menudo en el pasado de la @… ¿Realmente existía en algún lugar oculto de nuestros teclados en las máquinas de escribir de antaño o en las primeras computadoras antes de internet? ¿había una vida antes de internet?
La @ era rara pero existía. Y estaba entre las opciones de un teclado de teletipo que según Wikipedia inspiró a Ray Tomlinson, el investigador que a fines de 1971 inventó el correo electrónico. También lo conocemos escrito en inglés como “email” y pronunciado “imeil”.
Tomlinson trabajaba para una empresa llamada Bolt, Beranek and Newman (BBN) que en ese entonces estaba a la vanguardia de la conectividad entre computadores: había fabricado los primeros cuatro servidores que en 1969 fueron el embrión de la internet.
En 1971 internet tenía apenas 15 servidores o nodos conectados a la red. En aquellos años se llamaba Arpanet y estaba financiada por el Pentágono en Estados Unidos.
Tomlinson buscaba perfeccionar un incipiente sistema de envío de mensajes dentro de esa red. Se buscaba que el mensaje saliera de un computador, que viajara por el sistema y luego pudiera ser almacenado y leído en otro computador.
Para situarse en la historia: faltaban 20 años para que se inventara la web. Y unos 25 años para que el uso de internet comenzara a masificarse. En esa época los comunes mortales usaban máquinas de escribir y solo algunos pocos tenían acceso a computadoras.
Cuenta la ciberleyenda que la elección de la @ fue casual. Tomlinson buscaba un símbolo que no pudiera ser interpretado equívocamente y que al mismo tiempo sirviera para dividir en dos las direcciones en el nuevo sistema. La primera parte para identificar al usuario, y la segunda para informar sobre el servidor desde el cual estaba enviando su mensaje.
El símbolo@ aparecía en máquinas de escribir desde el siglo XIX. En inglés, por cierto, el símbolo @ quiere decir ‘at’ que equivale al ‘en’ en español. Así, la dirección colocada se leería en inglés como usuario ‘en’ un-servidor.com.
¿Por qué se dice arroba en español? Desde tiempos remotos el símbolo fue utilizado para representar a la arroba que es una medida de peso (11,5 kilos, 25 libras).
En italiano, la @ se llama ‘chiocciolina’, que al igual que el ‘petit escargot’ francés quiere decir ‘pequeño caracol’. En holandés se dice ‘api’, o sea ‘cola de mono’, en finlandés ‘miau’ o ‘cola de gato’, en noruego ‘kanel-bolle’ o ‘pastel de canela’, de acuerdo con una pequeña recopilación realizada por el propio Tomlinson.
El tema fue abordado hace algún tiempo en uno de los foros del Centro Virtual Cervantes (www.cvc.es), donde Montserrat Ferret Cros hizo un aporte determinante para entender símbolo: “los copistas, en la edad media, ligaban las letras”, y entonces la @ provendría directamente del latín “ad”, que corresponde al significado en inglés.
Esa misma persona explicó en ese entonces que en la España del renacimiento la @ era utilizada por la preposición ‘a’, pero que a causa de las transacciones con sacos, medidos en arrobas, se produjo una mutación. Y así “25 arrobas @ 2 pesos” se transformó en “25 @ 2 pesos”, y la palabra arroba quedó fundida con el símbolo.
“Esta historia se habría olvidado de no ser por la máquina de escribir, que incluyó la @, por lo menos en versiones para usuarios contables”, comentó Montserrat Ferret.
Tomlinson asegura que ya habían comenzado los 1990 cuando se percató de la trascendencia del sistema de envío de correo electrónico creado 20 años antes.
La invención del email no está asociada a ninguna frase célebre: el primer mensaje de correo electrónico decía simplemente, o complejamente, “QWERTYUIOP”, es decir la primera fila de letras de un teclado.
“Los mensajes me los enviaba a mí mismo, de una máquina a otra”, ha recordado Tomlinson. Las dos máquinas estaban en la misma sala, pero su conexión no se producía mediante un cable, sino que pasaba primero por la Arpanet la red que fue predecesora de internet.
Todo lo que ha sucedido desde entonces… Por muchos años el correo electrónico fue la aplicación más utilizada en el entorno de Internet.
En el mercado boliviano donde encontré escrito el símbolo de la @ pareciera que el tiempo no ha pasado. Pero una mirada atenta permitía descubrir centros de conexión a internet en el propio mercado. La vendedora conocía el término, y sus hijos sin duda usaban la red. Y claro, en un mundo interconectado, hasta el precio de la arroba de papas está influenciado por cotizaciones internacionales que se pueden chequear en internet.
Es una suerte, sin embargo, que a la par de las transformaciones la vida continúe y la arroba siga siendo usada también para las papas. Como Tomlinson, provoca exclamar: «¡qwertyuiop!».
Texto de Luis Córdova. Fue escrito hacia fines de los años 1990… Esta es la versión editada.
La fotografía fue tomada en 1995 apróx cerca del mercado Rodríguez en La Paz. La arroba está allí, probablemente los precios de la papa haya evolucionado desde entonces…
Deja una respuesta